COMPETITIVIDAD EN LAS PYMES
MARTES 10/MARZO/2010
Por: Cesar Hernández
La competitividad es sin duda un punto bien importante para el crecimiento de las Pymes. En la medida en la que mejoremos nuestra competitividad, podremos mejorar nuestros ingresos y nuestra PYME.
Los costos del desperdicio
Por lo general en las empresas se tiene un concepto del desperdicio que considera solamente los costos directos del producto desperdiciado y su costo de disposición, aunque a veces el costo final del producto terminado ya considera el rendimiento de los materiales, sin embargo estos costos solo están relacionados con los costos de disposición del desperdicio.
Consideremos por ejemplo que un proceso sea 95% eficiente, entonces los costos del desperdicio, entonces de acuerdo con esta definición, nuestros costos de desperdicio serían del 5% del costo de los materiales más los costos que pagamos a las empresas públicas o privadas por la disposición de este desperdicio. Sin embargo, el costo total del desperdicio puede llegar a ser de 5% a 20% de los costos de producción ya que éstos incluyen los costos adicionales que están relacionados con el desperdicio y que incluyen: las pérdidas de proceso, de calidad, de capacidad de planta, costos de materiales de limpieza, equipos para manejo de desperdicios, contenedores para desperdicios, espacio desperdiciado, costos de transporte de desperdicios, y los costos de mano de obra relacionados con estos proceso y los de manejo del desperdicio.
Una regla que se debe tomar en cuenta es: “Si no se mide cual el desperdicio, éste no se podrá reducir”.
Para este efecto, como punto de partida conviene establecer parámetros de medición del desperdicio que estén relacionados con la producción obtenida, por ejemplo, un porcentaje de desperdicio en relación con la cantidad producida. Solo así se podrán tener puntos de comparación contra los que se puedan medir las mejoras en la competitividad.
Otra forma el desperdicio que no percibimos está representada por la producción en exceso, ya sea debido al tamaño de los equipos, a la falta de control, por una supervisión deficiente, o por la falta de planeación. Este desperdicio ocasiona otros problemas como son: necesidad de espacio adicional de almacenamiento, se requiere establecer controles adicionales para los excedentes de producción, se ocasionan riesgos de obsolescencia o caducidad del producto, etc. todos estos factores inciden directamente en la competitividad.
El desperdicio de tiempo por procesos ineficientes, es una de las principales causas de la pérdida de competitividad, por ejemplo, en algunas las fábricas de muebles sobre pedido ofrecen tiempos de entrega, que van de 30 a 45 días. Al revisar todos los procesos, desde la venta, autorizaciones de crédito, compras, controles de almacenes, emisión de órdenes de producción, embarque, etc. nos encontramos que procesos, como el de procesamiento del pedido del departamento de ventas, que en condiciones normales tomaría unas cuantas horas, debido a la falta de un sentido real de servicio al cliente, en ocasiones toma hasta dos semanas, por diversas causas, por ejemplo a la ausencia del gerente de ventas quien está de viaje, mientras que el proceso de compras, que depende de las entregas de los proveedores, incrementa el plazo de entrega en otras dos semanas. Es decir, aún sin haber fabricado una sola pieza, ya se han tomado, en el mejor de los casos, cuatro semanas.
Debido a que producción maneja lotes de muchas piezas como parte de una estrategia de producción orientada a hacer eficiente la operación, los tiempos de entrega se extienden hasta en cuatro semanas, contadas a partir del recibo de la orden de fabricación. Todos estos desperdicios de tiempo causan cancelaciones de pedidos, debido a los tiempos de entrega y demoras excesivos, y como resultado final: una pérdida de competitividad.
Conclusión
La competitividad en las PyMEs se puede mejorar si se identifican las causas de raíz y no se atienden solamente sus efectos.
Asimismo se deben identificar los costos de los energéticos y cuál es su incidencia en los costos de los productos o servicios que ofrece la empresa.
Las mejoras en la competitividad de la empresa solamente se podrán obtener si hay un compromiso efectivo por parte de la alta dirección de la empresa.
El artículo anterior me pareció sumamente interesante ya que muchas de las empresas que existen no logran las utilidades que esperan debido a los costos que existe dentro de ellas, y muchas de las veces es debido a los desperdicios originados.
Para evitar los desperdicios considero que se necesitan diferentes medidas es decir todo va relacionado; como ejemplo es, que si existe un desperdicio por exceso de producción, este exceso se debe a la falta de planeación que hubo desde el principio, pues no se consideró las dimensiones de la maquinaria o de igual forma no se estableció un plan eficaz para el uso de la maquinaria y como consecuencia de ese mal plan se está presentando un alto grado de desperdicio que para la empresa implica costos.
Todas las empresas deben de prestar atención en que es lo que está originando dichos desperdicios para que puedan corregir y evitar ese tipo de situaciones, pues a veces es más fácil tratar con esos desperdicios que evitarlos y es donde el problema causa mayores estragos en la situación financiera de la empresa. Es por esa razón que me pareció bastante importante el artículo ya mencionado.
ALUMNA: ROBLES AVELINO YARENI EDITH GRUPO:253
PROFESOR: SAMUEL GOMEZ PATIÑO
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